Este 13 de Febrero celebramos el miércoles de ceniza.
Con esta celebración damos comienzo a la Cuaresma, tiempo de preparación a la Pascua.
Durante estos 40 días tenemos la importante labor de recapacitar y mejorar nuestras obras e intentar acercarnos más al mensaje de Jesús.
La tarea no es fácil y para no olvidarnos de ello e intentar ser menos egoístas, caprichosos ... la iglesia nos propone la oración, el ayuno y la limosna (dar ayuda al que no tiene).
La oración todos sabemos que es hablar con Dios como un Padre bueno que nos quiere y nos perdona.
El ayuno es privarnos de comer en algunos momentos del día, pero ésta práctica es para personas adultas.
La abstinencia es no comer carne, el miércoles de ceniza, los viernes de la cuaresma y el viernes santo. Algunas personas por diversos motivos no pueden practicar esta costumbre y como desean poner un símbolo de ofrenda a Dios lo sustituyen por algo que les guste mucho o apetezca (dulces, una actividad lúdica ....).
El color de este tiempo litúrgico es el morado y se eliminan las flores del altar como símbolo de austeridad.
